poema

TUZ: La Orduña, 2015

La bicicleta es / desde la ventana / la bicicleta azul
y el domingo / un amarillo hecho pedazos
en el cuerpo o en la boca

Allí seguirá el arco del sol / mañana
tienes hambre / sólo hambre / y el café es como ayer

(1959 cae en el paréntesis de dos años muy tristes,
no me preguntes por qué)

cuando la música es triste y más húmeda
y muy mediodía
come árboles:
pirul, limón, mandarina
y tus ojeras abiertas permanentemente
como las cavernas de Lascaux

levantas las comisuras y fijas la ciudad
con los lugares comunes de la filosofía
o de la literatura
o del arte en general

la ciudad es una torre de luz y un generador en el desierto
al mismo tiempo

nosotros (como seres que somos)
bebemos sol o lluvia

cuando hay lluvia
cae
fuertemente
atraviesa una delgada capa de polvo
mueve los charcos y la luz y cabalga como una zebra

hablamos de las frecuencias magnéticas en la sobremesa
vibramos con muchos colores y músculos y reímos

o nos cansamos de reír
y entonces vamos por la vida
como imágenes de otro sueño

nos suspendemos en el tiempo
corrientes y eléctricos
como un ruido
con dulces vibraciones
en esta década de lloviznas

[TUZ, 2014]

La ilustración es un detalle de la portada: tinta china y vino tinto sobre Fabriano de 120g.